sábado, 10 de marzo de 2018

Campeonato de promoción

Laia Castella

El taekwondo es un arte marcial que llevo practicando desde los 4 años y por primera vez este sábado se me ofreció la oportunidad de participar en un campeonato de técnica. A menudo, la técnica es uno de los aspectos más minusvalorados para aquellos que observan las artes marciales desde lejos. Sin embargo, personalmente, constituye la parte más difícil de perfeccionar. Este sábado 10 de marzo por la mañana acudimos 5 compañeros del gimnasio y yo (siendo la más joven) a Leganés para participar en nuestro primer campeonato de promoción de pumses. 
Los pumses (también conocidos como poomses o formas) son una combinación de movimientos que tienen como objetivo demostrar la correcta ejecución de las técnicas del taekwondo. De manera más sencilla y visual, se trata de un combate contra contrincantes imaginarios en los que todos los movimientos deben ser ejecutados de manera correcta a la vez que con estética. Al ser la primera vez que participaba, al prinicipio me sentí ligeramente nerviosa. Tan solo había tenido apenas una semana para corregir malos hábitos que llevaban conmigo desde los 6/7 años y no me sentía nada segura. Sin embargo, los nervios se evaporaron al tocar el primer tapiz. Respiré hondo, me olvidé de mi entorno por completo y me dejé llevar por mis brazos y piernas al ejecutar esos movimientos que conocía de memoria. Uno de los aspectos que más me habían corregido durante la semana anterior fue que no hacía la técnica con la suficiente fuerza; pero en el tapiz todo fue distinto. 
Al ver a tantas personas ejecutando los movimientos tan marcados me motivó para dar lo mejor de mí en cuanto a potencia y precisión. Durante el campeonato realicé tres pumses seguidos a lo largo de tres tatamis (suelo de goma EVA) algo que nunca había hecho en el gimnasio y que hizo que resultara difícil acostumbrarse al nuevo espacio. El campeonato en sí supuso un esfuerzo enorme para tratar de controlar mi concentración a la hora de realizar las secuencias de movimientos. La mera participación me hizo sentir mucho más enfocada en la belleza y perfección de la técnica, al mismo tiempo que fui capaz de aprender de todas las personas que me rodeaban. No habría llegado hasta aquí sin mi maestro ni mi coach de pumses y les agradezco muchísimo todo lo que me han ayudado, especialmente durante la última semana. Sin duda volveré a repetir esta maravillosa experiencia en cuanto se presente la ocasión.
Dejo aquí uno de los pumses que realicé: Taeguk Yuk Chang, el pumse relacionado con el gam, símbolo del agua.

1 comentario:

  1. Enhorabuena por tu participación, pero sobre todo, por tus ganas de superación.

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