1º H
Soy una persona a la que le gustan
mucho los deportes, pero desde que dejé de jugar al fútbol hace unos cuantos
años, no me había vuelto a interesar demasiado. ¿Y quién iba a decir que de
pronto iba a volver a jugar al fútbol y, además, por una buena causa?
El pasado fin de semana, el 9/06/2018,
tomé parte en una liguilla de fútbol solidaria para poder contribuir a la
defensa de los derechos humanos en el país que acoge este año el mundial de
fútbol, Rusia.
Esta liguilla se llevó a cabo en el IES
Herrera Oria, como parte de los muchos proyectos que desarrolla la Red de Escuelas de
Amnistía Internacional.
Cuando llegamos al centro nos dividieron en equipos con nombres como Respeto, Valientes.... y nos mezclaron con alumnos de otros centros; también nos dieron las equipaciones. Me tocó en un equipo en el que sólo me conocía a mí mismo; estuve con otras 4 chicas de distintos centros, a las que no conocía de nada, pero nos llevamos bastante bien.
Cuando llegamos al centro nos dividieron en equipos con nombres como Respeto, Valientes.... y nos mezclaron con alumnos de otros centros; también nos dieron las equipaciones. Me tocó en un equipo en el que sólo me conocía a mí mismo; estuve con otras 4 chicas de distintos centros, a las que no conocía de nada, pero nos llevamos bastante bien.
Cuando nos tocó jugar, me sorprendí
gratamente de que me acordaba de jugar al fútbol. Tenía mis dudas, pero al
final saqué algo de dentro y jugué francamente bien.
Aunque no pudimos más que
ganar un partido, disfrutamos mucho jugando con otras personas de
distintos centros.
Cuando terminó la liguilla de fútbol, nos
ofrecieron un pequeño picnic, que estaba buenísimo, y nos dieron unos pequeños
regalos a cada uno.
Ha sido una experiencia fantástica, ya
que no solo hemos hecho ejercicio durante un sábado por la mañana (bastante
complicado de levantarse a esas horas, por cierto) sino que conocí a muchas
personas nuevas con las que pasamos una estupenda mañana y además pudimos
colaborar por una buena causa.
De un sábado por la mañana no se puede
pedir más.